Zlatan siempre ha sido un futbolista único, un jugador de esos que son merecedores de pagar una entrada por verlo sobre el césped 90 minutos haciendo magia. Ibrahimovic está elevado a lo divino por los cientos de golazos que ha conseguido a lo largo de su carrera, golazos para ver varias veces en YouTube repetidos y nunca cansarnos de ver semejantes obras de artes, (algunos cuentan con miles de reproducciones en YouTube). Elevado a lo divino por sus regates imposibles a defensores rivales, por los gestos técnicos que nos deja cada jornada, sólo al alcance de los más privilegiados futbolistas de élite. Además, su imponente poderío físico lo aprovecha con una sencillez pasmante que le sirve para adelantarse y ganar la posición a sus rivales. Capaz de regalarnos asistencias maravillosas y milimétricas a sus compañeros. Sin duda, hablamos de un talento innato brillante, sumado a un físico sobresaliente. Lo que nos deja un resultado de futbolista total. Sus excelsos recursos nos mues