Ir al contenido principal

A Rey muerto Rey puesto


"Por ahí dicen que a rey muerto rey puesto, yo me descuidé un momento y tú me buscaste reemplazo...No esperaste ni siquiera a que los meses se fueran porque no sentiste el amor que tu me diste, por lo menos parecía que era sincero, pero me dejaste parado en aquella esquina esperando a que cumplieras aquella cita. Me dejaste, tú me buscaste reemplazo sin saber que me habías dejado roto el corazón, ese que una ves yo te entregué..." Comienza así la mítica canción de Edy Jey ("El reemplazo"), que fácilmente podríamos extrapolar al fútbol, más concretamente al banquillo, donde casi siempre se sienta un rey, el rey del club, mientras está ahí sentado, claro está. Mientras está sentado en ese banquillo, dirige a su equipo, lo entrena, trabaja y vive por él, es el rey, el amor de ese club, de esos miles de aficionados que parten sus gargantas por él y por los suyos. Pero él es el rey. Eso es indiscutible. Y como cualquier rey, manda, y manda mucho, todo ciertamente. Pero en el fútbol los reyes y el amor no son eternos, como en cualquier ciclo de la vida, se acaba.

Muchos son los que fueron reyes en su club, compartieron amor al club, a los aficionados, a unos colores, Pepe Mel en el Real Betis es uno de los ejemplos, regresó al Betis tras su primera etapa. Volvió a sentarse en el Villamarín, todos le adoraban, sus jugadores, los directivos...pero en el amor no todo es bonito, también existen diferencias y peleas, momentos difíciles que hay que afrontar y a veces incluso se llega a la ruptura, desenlace que ocurrió en este caso. Pero como recoge el dicho, a rey muerto rey puesto. Fueron tiempos revueltos en el Betis pero un soplo de aire fresco en el club con la llegada de Merino ha encendido la llama de un nuevo amor. Ya nadie recuerda a Mel, ni sus declaraciones de amor al club, ya simplemente es un rey muerto.

En el Valencia tuvieron un rey, Nuno, muy del gusto de los plebeyos, incluso le adoraron durante un tiempo por sus logros en clasificaciones a competiciones europeas, pero una vez más ese amor se rompió, se truncó y se volvió odio. En poco tiempo este amor se convirtió en rabia y acabó con otro rey muerto, para dar paso a otro rey, Gary Neville, que aunque aún no es un rey muerto, no le doy muchas esperanzas de vida. De hecho nunca ha sido un amor consumado, sino más bien un pequeño romance desesperado.

Podríamos hablar del mejor ejemplo de un rey muerto y amado por sus aficionados, este no puede ser otro que la relación tan profunda que mantuvieron y mantienen Mourinho y el Chelsea. El portugués nunca ha escondido su amor al conjunto londinense, allí le aman y él los ama, pero como ya hemos dicho antes, el amor no es fácil, y se sufre, se desgasta y el tiempo acabó rompiendo este amor que ambos se juraban. Mourinho acabó siendo otro rey muerto y en su lugar apareció Hiddink, el rey puesto, el hombre que le devolvió la alegría y le encencdió esa llama del amor que el club había perdido.

En el fútbol todos apreciamos en algún momento a alguien, lo queremos, incluso podemos llegar a amarlo, compartir los sentimientos con alguien que dirige el club, que lo da todo por tu club, es lo máximo para hacer crecer el amor. Pero en cualquier descuido el amor puede romperse y se fácilmente recompuesto por otro amor nuevo. Porque dicen que en el fútbol la ciencia más cierta es la que Edy Jey lleva en sus versos, por ahí dicen que a rey muerto rey puesto, yo me descuidé un momento, y tú me buscaste reemplazo.


Borja López (@MiFutbol2)

Comentarios

Entradas populares de este blog

El motivo por el que Mohamed Salah eligió el dorsal 74

Redactado Por Borja López (@MiFutbol2) Mohamed Salah dejó el Chelsea para partir a préstamos hacia la Fiorentina. A cambio del fichaje de Juan Guillermo Cuadrado, el egipcio tuvo que dejar Inglaterra para partir a la Serie A. Luego de pasar el pertinente reconocimiento médico Salah se disponía a elegir dorsal, y es aquí donde comienza lo emotivo de esta historia. Mohamed Salah decidió portar el número 74. Dorsal un poco raro para un jugador de fútbol, pero este particular dorsal tiene una explicación y fue elegido para rendirle homenaje a los setenta y cuatro fallecidos en la masacre de Port Said. El 2 de febrero de 2012, los hinchas de Al Masry, defensores del régimen de Mubarak en Egipto, invadieron la cancha luego de vencer a Al Ahly, que era considerado cercano a la Primavera Árabe, y atacaron a sus hinchas. Los policías cerraron todos los accesos del estadio Port Said y comenzó la masacre entre los hinchas de ambos clubes y la policía, dejando más de mil herido y 74

El día que Steven Gerrard, nos abandonó

            STEVEN GERRARD: LEGEND OF LIVERPOOL Gerrard llegó al Liverpool con 8 años. Fue escalando poco a poco por todas las divisiones inferiores, hasta que un frío dia de Enero debutaba con el primer equipo en la Premier League, con tan sólo 17 años. Desde aquel frío día de su debut hasta que abandone el club, al término de esta temporada, habrán pasado 17 años. Steven ha pasdao mas de media vida unido al club que ama, club con el que soñaba jugar desde pequeño, y del que siempre ha sido un hincha más cantando el “You´ll never walk alone”. Casos como el de Gerrard son un oasis en el desierto de un futbol que hace muchos años dejó de ser un deporte en el que se jugaba por amor a unos colores para convertirse en un gigantesco negocio que genera millones y millones de ganancias a jugadores que se venden al mejor postor. De hecho, se pueden contar con los dedos de las manos los jugadores que eligen ser una leyenda de su club, antes que sucumbir a los colores de una mareante

Francesco Totti: "El Gladiador del Coliseo romano"

Marzo de 1992, la Roma estaba teniendo un buen día, ganaba 0-2 en su visita al estadio del Brescia, Vujadin Boskov mira hacia la banda y manda llamar a un romano de 16 años. Nervioso pero confiado de sí mismo el joven romano entra a la cancha. No juega más de diez minutos, pero unos minutos que a él le saben a gloria. Después de tantos partidos jugados en los barrios de Roma con el Fortitudo, el Smit Trastevere y el Lodigiani, Francesco Totti estaba jugando un partido de la Serie A. Ya son más de 700 partidos los que ha disputado desde aquel debut, y todos con el mismo club, con su club, y más de 300 goles con la misma camiseta. Para Totti la Roma es la vida, pudo salir del equipo en momentos de duda y, sobretodo, por grandes ofertas que le llegaban, pero Totti es romano, siente la ciudad, ha crecido en Roma, ha vivido en Roma y hablar de su vida futbolística es hablar de la ciudad eterna, de Roma. Totti es el símbolo romano. Según los aficionados de la Roma, es el des